El concejal popular Jose Mª Béjar debería dimitir de su cargo ante el NEFASTO ejercicio de sus responsabilidades como concejal de Parques y jardines.
La totalidad de los parques vileros muestran señales evidentes del abandono al que están sometidos por parte de la corporación municipal.
No sólo están las pruebas evidentes de la suciedad que impera en nuestro pueblo, reina y señora de cada rincón de cada una de las calles que forman los cada uno de los conocidos barrios que conforman nuestro querido pueblo.
Si va usted paseando por la Barbera, ars Magna del egocentrismo pepero, podrá ver que la sequía gobierna junto con la suciedad. El césped está desparecido, hay árboles secos, y no sólo me refiero al carrasco centenario que ya secaron.
Si se sigue un poco más al norte, veremos como el concejal Béjar, y por extensión el PP en pleno, ha dejado morir ese árbol que durante décadas fue único en la Europa continental. Ese Drago superviviente a la guerra civil al que el PP ha querido borrar la memoria histórica.
Si no nos deprimimos y queremos seguir paseando hasta el Censal por la plaza de la “Creueta” más vale que cerremos los ojos para no ver como hay dos naranjos agonizantes que ven con estupor como han dejado morir a sus hermanos de plaza. Menos mal que es quizá el parque más céntrico de la Vila y ahí está: abandonado como si fuera una vulgar rata.
Cuando hayamos llegado al Censal, observaremos dos cosas: una que las rampas no funcionaran, y dos que hay bastantes plantas que han sido dejadas de la mano de Dios y que en este clima seco no sobreviven sin la ayuda humana. Y así ha sido.
Y por si no se quieren cansar, cuando llegué el “día de la processó de la Burreta” cuando lleguemos al parque de Les Puntes del Moro, no se pregunten que ha ocurrido con los árboles y plantas que allí hay porque ya les responderé yo ahora de antemano: las plantas y árboles han muerto por la pasividad del concejal y del ayuntamiento con lo que nos demuestran que NO quieren a La Vila más que a sus bolsillos, ÚNICO INTERÉS de la MOCIÓN de CENSURA.
La totalidad de los parques vileros muestran señales evidentes del abandono al que están sometidos por parte de la corporación municipal.
No sólo están las pruebas evidentes de la suciedad que impera en nuestro pueblo, reina y señora de cada rincón de cada una de las calles que forman los cada uno de los conocidos barrios que conforman nuestro querido pueblo.
Si va usted paseando por la Barbera, ars Magna del egocentrismo pepero, podrá ver que la sequía gobierna junto con la suciedad. El césped está desparecido, hay árboles secos, y no sólo me refiero al carrasco centenario que ya secaron.
Si se sigue un poco más al norte, veremos como el concejal Béjar, y por extensión el PP en pleno, ha dejado morir ese árbol que durante décadas fue único en la Europa continental. Ese Drago superviviente a la guerra civil al que el PP ha querido borrar la memoria histórica.
Si no nos deprimimos y queremos seguir paseando hasta el Censal por la plaza de la “Creueta” más vale que cerremos los ojos para no ver como hay dos naranjos agonizantes que ven con estupor como han dejado morir a sus hermanos de plaza. Menos mal que es quizá el parque más céntrico de la Vila y ahí está: abandonado como si fuera una vulgar rata.
Cuando hayamos llegado al Censal, observaremos dos cosas: una que las rampas no funcionaran, y dos que hay bastantes plantas que han sido dejadas de la mano de Dios y que en este clima seco no sobreviven sin la ayuda humana. Y así ha sido.
Y por si no se quieren cansar, cuando llegué el “día de la processó de la Burreta” cuando lleguemos al parque de Les Puntes del Moro, no se pregunten que ha ocurrido con los árboles y plantas que allí hay porque ya les responderé yo ahora de antemano: las plantas y árboles han muerto por la pasividad del concejal y del ayuntamiento con lo que nos demuestran que NO quieren a La Vila más que a sus bolsillos, ÚNICO INTERÉS de la MOCIÓN de CENSURA.
Por favor concejal Béjar, desde aquí le pido y por el bien de todos y cada uno de los árboles que malviven en los parques por usted “regentados”, dimita y deje su cargo a alguien que muestre un poco más de interés por su trabajo, porque ha quedado claro que usted solo está ahí, sentado en la tribuna, para llenarse los bolsillos.
G.P.